Huevos fritos encapotados
Si los huevos fritos es una de las mayores delicias que existen, estos huevos encapotados lo son aún más!! Huevos fritos cubiertos de bechamel y empanados.
El objetivo es conseguir que la yema del huevo esté líquida cuando el huevo llegue al plato.
La elaboración es sencilla pero requiere de cierta habilidad para manipular el huevo sin que se rompa la yema y conseguir el punto exacto de fritura.
Ingredientes (6 personas):
- 8 huevos (mejor pequeños) (2 para rebozar)
- 110 gr harina
- 650 ml leche
- Pan rallado
- Aceite oliva virgen
- Sal
En primer lugar, freír los huevos (añadir sal). Es importante que los huevos sean muy frescos para que no se extiendan mucho. Es preferible que estén poco hechos.
Untar una superficie con un poco de aceite e ir colocando los huevos encima. Si es preciso, con unas tijeras recortar para dar forma redonda.
Preparar una bechamel no muy ligera (más o menos como si fuera para croquetas). Yo la preparo en la thermomix (50 gr aceite -2 min a 90º, vel 4-, añadir la harina -2 min, 90º, vel 4 y añadir la leche y la sal - 7 min, 90º, vel 4. Añadir más leche si es necesario).
En la misma superficie untada de aceite de oliva (para que no se pegue), echar 6 montoncitos (equivalente a 1-2 cucharadas) y extender formando un círculo (tiene que quedar una base no muy gruesa). Poner un huevo frito encima de cada base y verter más bechamel encima de cada uno hasta cubrirlos con una capa no muy gruesa. Dejar enfriar y reposar al menos una hora.
El siguiente paso es empanarlos. Para ello, preparar en un plato dos huevos batidos y en otro pan rallado. De uno en uno, despegar con mucho cuidado cada huevo, ayudándose de una espumadera o pala y pasar por el huevo batido y después por el pan rallado. Ir reservando en una bandeja.
En el último momento, freír en aceite caliente, con cuidado al darlos la vuelta para que no se rompan. Dejar dorar ligeramente para que la yema quede líquida y servir inmediatamente.