Carpaccio de gamba
Receta sencilla para preparar un carpaccio de gamba. Para un buen resultado, lo más importante es la calidad de las gambas.
Como se come crudo, hay que tener en cuenta que, para prevenir anisakis, aconsejan congelar el producto durante un periodo de 48-72 horas. Se puede comprar gamba fresca, preparar el carpaccio (sin aliño) y congelar o bien, prepararlo con gamba congelada.
Ingredientes (para una fuente):
- Gambas congeladas (8-10)
- Aceite oliva virgen
- Sal
- Pimienta negra molida
- Limón
- Lima (opcional)
- Cebollino (opcional)
Descongelar las gambas, pelar y limpiar bien quitando cuidadosamente el canal negro que suelen tener. Abrirlas longitudinalmente a la mitad y colocar extendiéndolas sobre un papel vegetal (de horno), ni muy separadas ni muy juntas. Tapar con otro papel vegetal y dar golpes con un mazo de cocina o con el fondo de una cazuela hasta que queden finas (del grosor que te gusten).
Meter unos minutos en el congelador para que se despeguen bien del papel.
Mientras tanto, untar la fuente en la que vayamos a prepararlo con aceite de oliva virgen para que el carpaccio no se pegue. Sacar las gambas del congelador y colocar en la fuente. Añadir sal, un poco de pimienta, un poco (no mucho) de ralladura de lima, unas hojitas de cebollino picado, unas gotas de limón y aceite de oliva virgen.
Servir acompañado de unas tostadas de pan.
Si se hace con gamba fresca el proceso es similar. Limpiar bien las gambas, cortar a la mitad, aplastar bien entre dos hojas de papel vegetal y congelar 48-72 horas. Cuando se vaya a consumir, sacar y poner sobre fuente untada de aceite y aliñar.
